Enfermedad de Chagas: ¿qué es y cómo se transmite?

Esta enfermedad se transmite principalmente a través de la picadura de ciertos insectos: grandes chinches hematófagas -conocidas como chinches besuconas o vinchucas en los países de habla castellana o barbeiros en Brasil- que llevan en sus intestinos un protozoo, el Trypanosoma cruzi (T. cruzi).

Como explica el experto en enfermedades tropicales: "El contagio se produce en la mayoría de los casos por la deposición en la piel de una pequeña cantidad de heces emitidas por el insecto cuando pica o inmediatamente después: la picadura, que se produce por la noche sobre todo en la piel de la cara o más raramente en otras partes del cuerpo dejadas al descubierto, provoca picor. Rascarse la herida, así como tocarse la boca y los ojos con las manos manchadas de restos de heces, contribuye a extender sobre la piel las heces del insecto que contienen el parásito".

Además de las picaduras de insectos, las otras vías de transmisión de la enfermedad de Chagas son las siguientes:

• transmisión de sangre infectada entre 2 individuos: a través de una transfusión de sangre o contacto con sangre/mucosas o paso de jeringuillas entre consumidores de drogas o trasplantes de órganos;
• durante el embarazo o el parto, cuando la sangre pasa de una madre con enfermedad de Chagas al feto (contagio vertical);
• ingestión de alimentos o bebidas contaminados.

La enfermedad de Chagas también está presente en menor medida en Europa e Italia, y en general hay dos motivos de dicha presencia:

• debido a los flujos migratorios desde América Latina hacia Estados Unidos y Europa, en particular España e Italia;
• debido al flujo de turistas hacia México, Centroamérica y Sudamérica. 

Como explica el experto: "Aunque en la gran mayoría de los casos los episodios de contagio se limitan a América Central y del Sur y se deben al modo de transmisión a través del insecto vector, se ha diagnosticado un número nada desdeñable de casos entre inmigrantes de América Latina a Europa y América del Norte y entre quienes han recibido transfusiones o trasplantes de órganos de personas infectadas (que no sabían que lo estaban) o entre los hijos de mujeres infectadas procedentes de zonas endémicas".

Los estrictos controles hospitalarios en Italia sobre donantes de sangre u órganos excluyen la presencia de sangre contaminada por T. cruzi, responsable de la enfermedad de Chagas, en territorio italiano", explica el Dr. Gaiera. 

Los donantes de sangre que regresen de viajes a México, América Central, América del Sur (zonas endémicas de T. cruzi) deben abstenerse de donar durante 3 meses: tras observar el periodo de suspensión prescrito para excluir un posible contagio, deben realizarse una prueba serológica para buscar anticuerpos en la sangre contra T. cruzi.

Hay casos raros de transmisión de la enfermedad de Chagas por la comida callejera: los viajeros a Sudamérica deben tener especial cuidado de no consumir bebidas sin sellar (como las típicas bebidas de zumo de caña de azúcar) y/o alimentos expuestos al aire sin la protección adecuada.

Puede ser una enfermedad asintomática durante años. La ausencia de síntomas puede llevar a las personas infectadas a descuidar los exámenes y terapias necesarias para el tratamiento de la enfermedad de Chagas; esta enfermedad si no se trata puede incluso llevar a la muerte del paciente tanto en la fase aguda (en las semanas posteriores a la infección) como sobre todo en la fase crónica con afectación principalmente cardiaca.

Como explica el médico "Puede manifestarse de 3 formas también llamadas fases, a las que corresponde la presencia o ausencia de síntomas: 

1. aguda: puede ser sintomática o asintomática: si es sintomática suele presentarse como una infección del corazón (miocarditis) o más frecuentemente en niños como una infección de las meninges y el encéfalo (meningoencefalitis);
2. crónica indeterminada (también llamada latente): no presenta síntomas, sólo serología positiva para T. cruzi;
3. crónica: con daños más frecuentes en el corazón (cardiopatía dilatada, arritmia/arritmias ventriculares complejas, aneurisma del ápex ventricular del corazón, tromboembolismo, disfunción ventricular con insuficiencia cardiaca y muerte súbita) y menos frecuentes en el esófago y el colon (dilatación de estas partes del tracto gastrointestinal) y aún más raros en el sistema nervioso central (demencia, paresia)".

Las pruebas útiles para diagnosticar la enfermedad de Chagas y verificar la funcionalidad de los 3 principales órganos afectados (corazón, esófago, colon) son:

• 2 pruebas diferentes para detectar anticuerpos anti-T. cruzi en la sangre;
• electrocardiograma y ecocardiograma en caso de patología cardiaca (arritmias y miocardiopatía crónica);
• TAC abdominal y esofagogastroduodenoscopia y colonoscopia en caso de sospecha de afectación del tubo digestivo (megaesófago o megacolon).

También es posible realizar un cribado preconcepcional/prenatal/neonatal en mujeres y parejas de futuros padres que buscan un hijo.

Si se diagnostica la enfermedad, el médico especialista en enfermedades tropicales se centrará en comprobar la funcionalidad de los tres órganos principales afectados por la enfermedad de Chagas: "Mientras que en la fase 1 (aguda) y en la fase 3 (crónica) de la enfermedad de Chagas, el órgano más afectado es el corazón, seguido en la fase crónica por el esófago y el colon, en la fase 2 (indeterminada) el paciente está asintomático y sólo da positivo en sangre a los anticuerpos contra T. cruzi", explica el Dr. Gaiera.

Los tiempos de incubación de esta enfermedad tropical pueden variar en función del modo de infección. Según especifica el experto: 

• Infección por picadura de insecto: "Tiene un periodo de incubación de entre 1 y 2 semanas, cuando puede aparecer un bulto rojo/esponjoso en la zona donde se ha producido la picadura. Tras el periodo de incubación, en la mayoría de los casos aparece fiebre alta, que puede durar unos días, y suele haber síntomas y signos de sufrimiento cardíaco, pero también puede permanecer asintomática durante años (incluso 10-20 años)";
• Contagio a través de la sangre y/o el trasplante de órganos: "El periodo de incubación de la enfermedad de Chagas es más corto. Si está presente, la sintomatología se superpone a la de la fase aguda tras la picadura del insecto. Una vez que estos síntomas han desaparecido", prosigue el especialista, "la enfermedad puede permanecer silente durante toda la vida, en este caso hablamos de enfermedad de Chagas en fase indeterminada o de latencia, o bien, al cabo de décadas, puede cronificarse: esto ocurre en el 30-35% de las personas infectadas".

No existe vacuna contra la enfermedad de Chagas. Cuando se viaja por Sudamérica, la única forma de prevención es evitar las picaduras de chinches, evitando dormir en las típicas casas de campo hechas de barro y paja y rociando las partes descubiertas del cuerpo y/o incluso la ropa y las maletas/mochilas con repelentes de insectos (sprays o lociones tópicas), desinfectando periódicamente las casas y las zonas de trabajo y lavándose las manos con frecuencia (agua y jabón y soluciones hidroalcohólicas), evitando tocarse la cara, los ojos y la boca. También es aconsejable evitar la ingestión de alimentos y bebidas potencialmente contaminados y el contacto con sangre/mucosas (utilizando equipos de protección individual y preventivos).

Como señala el experto: "El benznidazol y el nifurtimox son los dos únicos fármacos antiparasitarios que han demostrado eficacia contra el T. cruzi; hasta hace 20 años sólo se utilizaban para tratar la fase aguda o congénita (heredada de los padres) de la enfermedad de Chagas, mientras que desde hace unos años también se emplean para prevenir la posible evolución de la enfermedad de la fase indeterminada a la crónica.     

En cambio, estos dos fármacos no han demostrado ninguna eficacia cuando se ha desarrollado la fase crónica cardiaca, intestinal o del sistema nervioso central: en estos casos, el tratamiento es sólo sintomático (es decir, sólo trata los síntomas, pero no puede curar ni erradicar la enfermedad)", prosigue el experto, "los dos antiparasitarios mencionados no están actualmente en el mercado en Italia y son difíciles de encontrar incluso a nivel internacional, pero hasta la fecha son los que se utilizan en el tratamiento de esta enfermedad".

El médico de Medicina Tropical advierte: "Por último, no deben subestimarse los importantes efectos secundarios de estos antiparasitarios orales, especialmente los del nifurtimox (un antiparasitario quimioterápico): ambos fármacos están, además, contraindicados durante el embarazo debido a la transmisión del fármaco de la madre al feto".

A determinados tipos de pacientes se les pide que tengan especial cuidado a la hora de elegir su destino de viaje, evitando las zonas endémicas de la enfermedad de Chagas o viajando por ellas, pero prestando mucha atención a las normas de comportamiento para la prevención de las picaduras de chinches:

• mujeres que buscan un embarazo o que ya están embarazadas;
• pacientes con insuficiencia renal o hepática;
• pacientes inmunodeprimidos y enfermos de Sida, y en otros casos específicos de los que el médico informará al paciente antes de viajar a destinos tropicales.

"Dado que todavía no existe una terapia eficaz y bien tolerada para todas las fases de la enfermedad de Chagas, todas las medidas de prevención ya mencionadas son aún más importantes, tanto en el caso de la infección por vectores como en el de la transmisión por la sangre, los trasplantes de órganos y los alimentos contaminados", concluye el Dr. Gaiera.