Candidiasis vaginal: cómo reconocerla y tratarla

"La candidiasis vaginal es una infección fúngica ligada a la colonización vaginal por un hongo, Candida, que puede afectar fácilmente a las mujeres, especialmente en edad fértil. Es un organismo acostumbrado a vivir en el cuerpo humano, donde convive con otros microorganismos y está presente en la boca, la garganta, el tracto gastrointestinal y los genitales. En concreto, en la vagina, junto con otras bacterias, forma un ecosistema vaginal capaz de garantizar la protección natural contra las agresiones internas y externas y de mantener el nivel de pH adecuado (normalmente entre 3,8 y 4). Cuando el sistema inmunitario está debilitado, o nos sometemos a tratamientos con antibióticos, o en momentos de estrés, el hongo comienza a multiplicarse de forma incontrolada, dando lugar a la candidiasis vaginal" - explica el Dr. Mignini Renzini.

La manifestación de la candidiasis vaginal se ve favorecida por numerosos factores de riesgo. En particular, se produce con mayor frecuencia:

• en personas que padecen enfermedades inmunosupresoras, generalmente más expuestas a las infecciones;
• en mujeres con diabetes, ya que el alto nivel de azúcar facilita el crecimiento del hongo Candida albicans;
• en mujeres embarazadas, debido a la alta concentración de estrógenos que favorece el aumento del pH vaginal, se crea un entorno más favorable para la proliferación de la cándida;
• en mujeres que hacen un mal uso de antibióticos y limpiadores íntimos que no son de calidad;
• en mujeres que han mantenido relaciones íntimas sin protección con personas afectadas.

La mayoría de las mujeres que sufren de candidiasis vaginal experimentan los síntomas siguientes:

• ardor y picor íntimos;
• dolor en la entrada de la vagina;
• enrojecimiento e hinchazón de los genitales externos
• sensación de sequedad vaginal;
• dolores durante las relaciones sexuales;
• flujo blanquecino denso;
• dolor al orinar;
• ulceraciones en la zona vaginal;
• lesiones cutáneas en la zona de los genitales externos y el perineo.

Para prevenir la candidiasis vaginal, es necesario cuidar la alimentación, mantener controlados los niveles de estrés y seguir algunas precauciones en la vestimenta y la higiene íntima, como:

• evitar la ropa ajustada;
• usar ropa interior de algodón, preferiblemente blanca;
• utilizar limpiadores de salvia y tomillo;
• después de nadar, sustituir el bañador mojado por uno seco;
• comer fruta y verdura y pocos hidratos de carbono.

"Si, a pesar de estas precauciones, está afectada por la cándida, es necesario someterse a un examen ginecológico. En la mayoría de los casos, el tratamiento recomendado es la terapia local con óvulos antifúngicos, cremas vaginales o duchas vaginales a base de antifúngicos. Su médico le prescribirá la terapia correcta para el caso concreto, analizando tanto los síntomas como el historial médico de la paciente", - concluye el Dr. Mignini Renzini.